Un corazón

*Un corazón de carne*

Mateo 13.23 - Pero la semilla sembrada en buena tierra representa a los que oyen el mensaje y lo entienden y dan una buena cosecha...

Con dificultad intataba entender lo que le decia ya que no escuchaba por ser sorda y muda. Al leer el texto escrito en la tablita, sus ojos se iluminaron y entonces brotó una sonrisa amplia y sincera.

En ocasiones nuestras mentes son como estaciones de radio que escuchamos con interferencia. Sabemos que Dios nos está hablando pero nuestro corazón demasiado rendido a otras cosas se resiste a escuchar. Es en ese momento cuando la estática de nuestro ego no nos deja ver con claridad que planes tiene Él para nuestras vidas.

Los afanes, el orgullo y la incredulidad son como estática que interfieren cualquier tipo de sintonía con Jesucristo. El Señor siempre nos está enviando mensajes, pero no siempre estamos con la actitud correcta y necesaria para recibirlos. Demasiada interferencia nos priva de poder recibir su mensaje de fe y de esperanza.

Es importante seguir el ejemplo de humildad y comunión que Jesús tenia con el Padre. A veces él se detenía en los caminos y hacía una observación profunda de lo que le rodeaba. En la necesidad de la gente podía ver y escuchar la voz de Yahvé Padre instándole a trabajar por un mundo mejor.

Saber escuchar la voz de Dios es imprescindible para nuestro crecimiento espiritual. Hablar con el Señor en una base diaria y leer su Palabra sin duda hará que la interferencia disminuya. Congregarnos como un solo cuerpo en gran manera edifica mucho si lo hacemos en genuino amor y en armonía.

Reconozcamos nuestra insuficiencia y estemos prestos a ser hoy la buena tierra en donde Jesús desea sembrar su mensaje de paz, amor y de esperanza. Recuerda, la voz de Dios se escucha mejor cuando nuestro corazón es de carne y no de piedra.

Serafín Alarcón Carrasquillo -

https://youtu.be/An8Sq-BBK6o