Con un poco de Amor La buena y sincera amistad no puede ni debe ser celosa. El verdadero amor nunca se pierde, siempre nos encuentra. Las letras y palabras del hombre y la mujer de Dios requieren nobleza de espíritu y sobre todo pertinencia en su sociedad. La mejor medicina para el alma atormentada es una buena dosis de sincero arrepentimiento y de perdón. Lo que decimos es el reflejo de lo que pensamos y en verdad sentimos. El que no sabe apreciar el consejo del Señor, no se debe quejar del dolor que conlleva no escucharle. Las obras de caridad y piedad que se hacen hipócritamente no tienen mérito y Dios no las ve con agrado. Hacedlo todo con AMOR sincero. No seas siempre severo ni siempre blando. Los extremos nunca son buenos. Las venganzas y los celos siempre se oponen al AMOR. Con un poco de AMOR todo se puede. De nada me sirve vivir si no tengo PAZ
